La semana que viene, Héctor (nuestro Gladihéctor) cumple medio siglo (¡ahí es nada!). Y como él ha dicho, a su edad, y gracias al MTB, está viviendo una segunda juventud. La bicicleta le ha dado, en dos años escasos, no solo una envidiable forma física de la que no gozaba desde sus años mozos, sino también un campo de relación con nuevos amigos (MNBC es "¡més que un club!") y apasionantes planes que le permiten un intenso contacto con la naturaleza, de la que es un gran amante y sabio conocedor que nos ilustra sobre la rica fauna y flora de la Comunidad de Madrid y aledaños.
Pero Héctor es mucho más que un biker. Héctor es uno de los cuatro bikers fundadores de MNBC y el más entusiasta. Hoy por hoy, MNBC no se entendería sin el incondicional apoyo y sin su estar ahí caiga quien caiga, siempre en la brecha. Y, además, Héctor tiene esa bondad rayana el candor infantil que, al tiempo que le hace disputar cada cuesta arriba y cada sprint especial como si fuera un chiquillo (cada vez cuesta más ganarle, todo hay que decirlo), hace que sea ese compañero del pedal amable y agradecido con quien siempre da gusto salir. Si Juan Ramón Jiménez hubiera sido biker y hubiera conocido a Héctor, en vez de Platero y yo, seguramente hubiera escrito una obra que empezaría, más o menos, así:
- Gladihéctor es enorme, peludo, biker; tan raudo en las cuestas, que se diría una exhalación, que no lleva bielas. Solo las bajadas trialeras son lentas, no nos vayamos a esnafrar. Lo dejo suelto y se va al Pardo, y acaricia tibiamente con las ruedas, rozándolos apenas, los senderos flanqueados de florecillas rosas, celestes y gualdas... Le pego un bocinazo: "¡Gladihéctor, para el carro, no me j...!", y da la vuelta con un pedaleo alegre que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal... Come cuanto le doy. Le gustan las barritas de Hacendado, los geles, huevos rotos con cerveza, y hasta un chuletón bien regado con Rioja en La Muñoza, después de la Cercedilla Challenge...
Todos los que formamos MNBC te felicitamos y te deseamos que cumplas muchos más; y que los veamos y disfrutemos pedaleando juntos.
¡Muchas felicidades, Héctor! ¡Muchas gracias, Héctor!
